En la primera mitad de 2023, la economía mexicana creció un 1.6%, alcanzando un nivel récord impulsado por el fortalecimiento del mercado interno, que incluyó un mayor consumo, inversión y empleo. Los salarios reales aumentaron, la inflación se mantuvo bajo control, el crédito a los hogares aumentó y la confianza del consumidor mejoró.
La inversión en maquinaria y equipo, así como en construcción no residencial, también contribuyó al crecimiento económico. La confianza de los productores alcanzó niveles récord, y la relocalización de procesos productivos en México atrajo inversión extranjera directa.
El sector externo, a través de remesas y exportaciones, contribuyó significativamente al crecimiento económico, y los ingresos por turismo también aumentaron.
En cuanto a los sectores específicos, las actividades primarias disminuyeron debido a condiciones climáticas desfavorables, mientras que la producción industrial creció impulsada por la construcción y la minería. Sin embargo, las manufacturas tuvieron un desempeño mixto.
Se espera que la construcción y la minería sigan impulsando la economía en la segunda mitad de 2023, junto con la relocalización de empresas. Las actividades terciarias, como los servicios de esparcimiento y financieros, continuarán siendo un motor importante de crecimiento económico.
El consumo privado en México creció un 2.7%, marcando el tercer año consecutivo de aumentos. Los bienes duraderos de origen importado tuvieron un aumento récord de casi el 48%, mientras que los bienes esenciales mostraron un comportamiento mixto. Los servicios continuaron su tendencia alcista.
Para el resto del año, se espera que el consumo siga siendo positivo, respaldado por la confianza del consumidor en niveles máximos, un aumento en la masa salarial del 7.3%, el acceso al crédito para bienes duraderos y la estabilidad en los precios de estos bienes debido a la apreciación del tipo de cambio.
La inversión fija bruta aumentó un 17% en la primera mitad de 2023, alcanzando un máximo histórico. La inversión en maquinaria y equipo de transporte y la inversión en construcción fueron los principales impulsores de este crecimiento. Se espera que la inversión en construcción continúe creciendo debido a proyectos de infraestructura, reducción de costos de materiales y la relocalización de empresas.
En cuanto al mercado laboral, se registró un aumento continuo en la población ocupada, tasas de desempleo mínimas y aumentos históricos en los salarios reales. La población ocupada creció en 1.9 millones de personas en el primer semestre de 2023. La tasa de desempleo promedió un 2.8%, la más baja desde que se comenzaron a recopilar datos en 2005. La tasa de participación laboral también alcanzó niveles máximos desde 2012.
Los salarios reales aumentaron, con un crecimiento anual del 4.7% en los registrados ante el IMSS. Se espera que la tendencia positiva en el mercado laboral continúe, especialmente en los sectores de la construcción y servicios.
México incrementó sus transacciones comerciales y se convirtió en el principal proveedor de mercancías de EE.UU durante los primeros siete meses de 2023, gracias al aumento de la producción de manufacturas y la reconfiguración de las cadenas de suministro. Las exportaciones aumentaron un 3.8% anual, alcanzando un récord histórico de 339 mil 519 millones de dólares. Las exportaciones petroleras disminuyeron un 24.2%, pero las no petroleras crecieron un 6.0%, especialmente las agropecuarias (3.2%) y las automotrices (17.0%).
Las importaciones también alcanzaron un máximo histórico, llegando a 346 mil 744 millones de dólares, con un aumento anual del 0.2%. Las importaciones de bienes de capital aumentaron un 23.2%, las de bienes intermedios no petroleros crecieron un 0.2% y las de consumo no petrolero aumentaron un 21.2%.
Para el resto de 2023, se espera un comportamiento comercial positivo, aunque más moderado. Las exportaciones seguirán creciendo debido a la menor escasez de insumos y las inversiones en el país, aunque la apreciación del tipo de cambio podría afectar su competitividad internacional. Las importaciones continuarán aumentando debido a la demanda interna sólida y las mayores inversiones en bienes de capital.
PERSPECTIVAS ECONÓMICAS AL CIERRE DE 2023
En 2023, el desempeño de la actividad económica en México dependerá principalmente del mercado nacional. El consumo privado se mantendrá sólido gracias a las políticas públicas implementadas durante la administración, que han mejorado las condiciones de vida de las familias vulnerables. Se espera que los niveles de empleo, confianza del consumidor y crédito al consumo sigan altos. Aunque el valor de las remesas en pesos podría haber disminuido debido a la apreciación del tipo de cambio, no se prevé un impacto significativo.
La inversión pública seguirá siendo importante, con la inauguración de obras de infraestructura que aumentarán la conectividad y la movilización de turismo y mercancías. Esto atraerá inversión nacional y extranjera, generará empleos y aumentará la productividad.
En cuanto a la inversión privada, se espera que la confianza empresarial siga siendo fuerte, lo que impulsará la demanda de inversión en maquinaria y equipo. A pesar de las tasas de interés y condiciones financieras restrictivas, las ganancias y retornos de inversión son históricamente altos.
La industria automotriz ha aumentado su producción, lo que impulsará la inversión en equipo de transporte. Además, se espera un aumento en la producción de vehículos eléctricos, lo que contribuirá al crecimiento económico a corto y mediano plazo.
La disminución de la inflación y la estabilidad en las tasas de interés harán que la demanda de crédito empresarial sea atractiva. Además, la disminución de los precios de materiales de construcción incentivará la inversión en el sector de la construcción.
En el ámbito externo, se espera que Estados Unidos siga demandando insumos mexicanos, lo que beneficiará a sectores industriales rezagados. La economía mexicana se espera que crezca entre un 2.5% y un 3.5% en 2023, con una inflación del 4.5% y una tasa de interés del 11.25%. El tipo de cambio se prevé en 17.3 pesos por dólar, y se anticipa un déficit de cuenta corriente del 0.8% del PIB.
En cuanto al precio del petróleo, se espera que no aumente significativamente debido a la oferta y demanda global, y se estima un precio de la mezcla mexicana de 67.0 dólares por barril. La producción petrolera se proyecta en 1,955 mbd para el cierre de 2023, superior a las estimaciones presupuestadas.
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