Es de conocimiento general que el 11 de octubre de 2023, el Gobierno de México promulgó un decreto con el propósito de fomentar las inversiones a través del fenómeno conocido como Nearshoring. Este decreto establece incentivos fiscales destinados a aquellas empresas que contemplen la posibilidad de reubicarse en cualquier región de México, siendo aplicable a diez sectores estratégicos de la economía mexicana.
El Nearshoring, en términos generales, constituye una estrategia de externalización mediante la cual una empresa decide trasladar parte de su producción a terceros, quienes, a pesar de encontrarse en diferentes naciones, están ubicados en destinos cercanos, compartiendo una zona horaria similar. Esta dinámica genera beneficios mutuos para todas las partes involucradas.
Los orígenes del Nearshoring en México remontan a la década de 1980, cuando el país comenzó a atraer inversiones extranjeras, especialmente en el sector manufacturero. La implementación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) en 1994 también desempeñó un papel determinante al impulsar la presencia de empresas extranjeras en territorio mexicano.
Con base en estudios focalizados en los proveedores de importaciones en México para el año 2021, se evidencia que un poco más del 45% provino de Estados Unidos, mientras que cerca del 30% tuvo origen en China, Japón, Alemania y Corea del Sur. Esta realidad, sin duda, presenta oportunidades para optimización en la actualidad. Vale destacar que Estados Unidos, como el principal importador global, desempeña un papel preponderante, y a pesar de que China ha sido históricamente uno de los mayores proveedores de dicho país, las relaciones bilaterales entre ambas naciones experimentan un declive progresivo en la actualidad.
El nearshoring en México ofrece una serie de beneficios para las empresas que deseen establecerse en el país:
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- Costos laborales más bajos.
- Cadena de suministro más corta.
- Acuerdo de libre comercio con EE. UU. y Canadá.
- Gran reserva de trabajadores cualificados.
- Sólido régimen de propiedad intelectual.
- Infraestructura empresarial bien desarrollada.
- Alineación de horarios con Norteamérica.
- Proximidad geográfica a Norteamérica.
- Reducción de costos de viaje y tiempo de respuesta.
- Mayor eficiencia logística.
- Acceso a zonas industriales desarrolladas.
- Acceso a carreteras de calidad y servicios básicos de construcción/estructura.
- Mayor demanda de servicios de nearshoring en México.
- Mayor crecimiento del talento de TI.
- Desarrollo de una infraestructura tecnológica potente.
Estos beneficios hacen que el nearshoring en México sea una opción atractiva para las empresas que buscan expandir sus operaciones en la región.
Ante esta situación, México ha ido ganando terreno poco a poco, y hoy nos encontramos con un escenario totalmente favorable para que más empresas en Estados Unidos adopten el nearshoring y se concentren en nuestro país. Es importante señalar que una de las ventajas principales de esta práctica es que, por un lado, promueve la optimización y reducción de costos en las operaciones de las compañías internacionales y, por el otro, fomenta la generación de empleos y el desarrollo económico del país al que se trasladan sus plantas de producción.
Retomando lo antes mencionado y puntualizando en el tema central, dicho decreto establece incentivos fiscales para las empresas que trasladen su producción a México en el contexto de la relocalización de cadenas de valor o nearshoring, dichos incentivos pueden alcanzar hasta un 89%.
Los incentivos fiscales, que contemplan deducciones de impuestos van desde un 56% a un 89% en inversiones hechas en 2023 y 2024, están destinadas a compañías que se dediquen tanto a la producción como a la exportación.
Las áreas contempladas en el decreto son:
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- Componentes electrónicos
- Semiconductores
- Baterías
- Motores
- Equipo eléctrico o electrónico
- Fertilizantes
- Farmacéutica
- Agroindustria
- Instrumentos médicos
- Cinematografía.
La cercanía con el principal mercado del mundo, EE UU, y el encarecimiento del transporte de mercancías han aumentado el atractivo de México. Según la propia Secretaría de Economía, el país latinoamericano podría captar 68.000 millones de dólares al año gracias al nearshoring. Los procesos de relocalización son lentos y costosos, y todavía no se tiene claridad sobre la magnitud de este fenómeno del que todos hablan, los datos, no obstante, son alentadores: la inversión extranjera directa que llegó a México en el primer semestre de 2023, rebasó los 29.000 millones de dólares, un monto 41% superior al mismo periodo del año pasado.
Los siguientes estados en México se beneficiarán más del nearshoring:
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- Nuevo León. Es el estado con el mayor potencial para el nearshoring debido a su ubicación geográfica, infraestructura, fuerza laboral calificada y ambiente empresarial favorable.
- Otro estado con un gran potencial para el nearshoring debido a su ubicación geográfica, su fuerza laboral calificada y su política fiscal favorable.
- Baja California. Es un estado con una larga tradición manufacturera, una ubicación geográfica privilegiada y una fuerza laboral calificada.
- Es un estado con una ubicación geográfica privilegiada y trabajadores calificados.
Estos estados comparten una serie de cualidades que atraen a las empresas que buscan establecer operaciones cercanas, como son:
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- Se encuentra cerca de los Estados Unidos. Esto permite a las empresas reducir los costos de logística y transporte.
- Infraestructura de vanguardia. Estos estados tienen infraestructura suficiente para la industria manufacturera, como carreteras, puertos, aeropuertos y centros de distribución.
- Trabajadores calificados. Estos estados tienen trabajadores calificados en industrias como la manufactura, la tecnología y los servicios.
- Entorno comercial favorable. Estos estados tienen políticas fiscales competitivas, regulaciones claras y un entorno comercial favorable.
Las deducciones fiscales varían según la naturaleza del activo, alcanzando niveles destacados, como el 89% para bienes como dados, troqueles, moldes, matrices, herramental, así como maquinaria y equipo destinados directamente a la investigación de nuevos productos o al desarrollo de tecnología en el territorio nacional. Adicionalmente, se establece una deducción adicional del 25% durante tres años para los gastos de capacitación de trabajadores, enfocándose en el fortalecimiento del capital humano. Estos beneficios fiscales están disponibles en todos los Estados y municipios del país, extendiendo la ventana de oportunidad para las empresas interesadas durante un año adicional.
Según una estimación del Consejo de Empresas Globales (Ceeg), se proyecta que México pueda agregar hasta un 2.5% a su producto interno bruto (PIB) en los próximos seis años debido al nearshoring, alcanzando niveles de inversión extranjera directa (IED) de hasta 50,000 millones de dólares exclusivamente a través de este fenómeno. Es crucial destacar que, para acceder a estos incentivos fiscales, las empresas deben garantizar que al menos el 50% de sus ingresos provengan de exportaciones en los ejercicios fiscales 2023 y 2024, presentando un aviso en el que manifiesten su decisión de aplicar estos estímulos fiscales en los 30 días naturales inmediatos siguientes al mes en que apliquen por primera vez dichos beneficios.
A pesar de los desafíos económicos globales, el nearshoring posee el potencial de mitigar los impactos adversos en México derivados de las grandes disrupciones mundiales y, de manera significativa, brindar beneficios en este entorno. La reubicación de plantas productivas extranjeras en nuestro país puede generar valor para las empresas, propiciar un aumento sustancial de empleos y mejorar el rendimiento general de las compañías mexicanas.
En medio de la búsqueda de la recuperación económica, afectada por la pandemia, el comercio exterior ha explorado alternativas para optimizar las cadenas productivas, y el nearshoring emerge como una solución ventajosa. En conclusión, el fenómeno del nearshoring representa una oportunidad generacional para elevar a México a un nuevo nivel de desarrollo económico, abriendo la puerta a una economía con mejores oportunidades y una mayor integración con Estados Unidos en industrias más avanzadas.
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