El 3 de agosto marcó un hito significativo en el mundo del comercio exterior y la seguridad empresarial. Ese día, el Diario Oficial de la Federación hizo público el Anexo 1 de la Tercera Resolución de Modificaciones a las Reglas Generales de Comercio Exterior para 2023. Este anexo trajo consigo una serie de cambios esenciales en la forma en que las empresas buscan obtener o mantener el codiciado estatus de Operador Económico Autorizado (OEA).
En el corazón de estas reformas se encuentra la creación de un Comité de Seguridad, una instancia que busca reunir la experiencia y la visión estratégica de los altos mandos y gerentes en diversas facetas de la seguridad empresarial. Esto incluye la revisión periódica de grabaciones de circuito cerrado de televisión (CCTV) y auditorías de sellos de seguridad, lo que representa un enfoque proactivo para garantizar la integridad de las operaciones.
Además, se ha puesto un mayor énfasis en la preparación para situaciones de crisis mediante la realización de simulacros anuales. Estos ejercicios se centran en evaluar la eficacia de los planes de contingencia en una amplia gama de escenarios, desde ataques cibernéticos hasta secuestros de conductores de transporte por parte de personas armadas.
La selección y contratación de nuevos socios comerciales, que abarcan desde proveedores de terciarización logística hasta proveedores de materias primas nacionales y extranjeras, también se ha sometido a un riguroso proceso de revisión. Este proceso incluye un análisis exhaustivo de riesgos relacionados con el lavado de dinero y el financiamiento del terrorismo, garantizando que las relaciones comerciales sean transparentes y éticas.
La seguridad laboral también ha sido un foco importante. La implementación de políticas en contra del trabajo forzoso y la inclusión de indicadores para identificar a aquellos clientes o proveedores que puedan plantear preocupaciones de legitimidad demuestran un compromiso claro con la responsabilidad corporativa.
En caso de que se descubra que un socio comercial no es confiable, se establece la obligación de notificar a las autoridades pertinentes y llevar a cabo una investigación exhaustiva antes de continuar cualquier colaboración. Además, se exige que los expedientes de socios comerciales sean más detallados y que se realicen evaluaciones periódicas al menos una vez al año.
El mapeo de flujo de mercancías y la identificación de áreas de descanso durante su transporte son ahora requisitos esenciales. Esto no se limita solo a las partes que manejan directamente la carga, sino que se extiende a todos los actores de la cadena de suministro, incluyendo transportistas, proveedores de terciarización logística, almacenamiento y proveedores nacionales y extranjeros.
La protección contra la introducción o diseminación de plagas también se ha convertido en una prioridad, con la implementación de procesos específicos para abordar este riesgo.
En cuanto al personal, se han intensificado las investigaciones periódicas, incluyendo verificaciones de antecedentes criminales, y se ha establecido una base de datos detallada de todos los empleados, tanto directos como indirectos, contratados por la empresa. Aquellos empleados que trabajen de manera remota también recibirán medidas de seguridad adicionales.
La capacitación se ha convertido en un pilar fundamental, abarcando temas como agricultura, lavado de dinero, terrorismo, colocación de sellos, ciberseguridad e inspección de vehículos, garantizando que todos los miembros del equipo estén preparados para enfrentar cualquier desafío.
Finalmente, se ha establecido una sólida estructura para notificar incidentes a socios comerciales y especialistas OEA, así como para documentar y aprender de los incidentes de seguridad en la cadena de suministro.
Estos cambios son de tal importancia que las empresas que ya cuentan con el estatus de Operador Económico Autorizado o Socio Comercial Certificado en cualquier rubro deben cumplir con los nuevos lineamientos del Perfil de Seguridad antes de finales de enero de 2024. Para aquellas con solicitudes en trámite, tendrán un plazo de seis meses a partir de la fecha de otorgamiento del Registro para adecuarse a estas nuevas regulaciones, lo que subraya la seriedad con la que se toma la seguridad en el comercio internacional.
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